Sobre decidir parar y hacer lo que hay que hacer.
Notas que de tiempos en tiempos, o mejor dicho de ciclos en ciclos, tu cuerpo, tu mente, tu vida parece necesitar reciclarse?
Es nuestro organismo, que incluye la parte consciente e la inconsciente, que necesita ajustar el GPS y reorientar la orbe de nuestro caminar.
El objetivo es estar más a gusto en esta vida y aprender. Pero claro, como se trata de algo que no podemos controlar, ya ves...
Creo que la mejor de las analogías para ilustrar la belleza, la certeza y la confianza este momento-proceso es la de la oruga que luego será mariposa.
El bicho pasa parte de la vida comiendo y caminando por ahí. De repente, algo en él le hace buscar un lugar para parar...
Él escoge un sitio que le parece seguro, con las mínimas condiciones para hacer lo que hay que hacer y se queda ahí, o-cu-rriendo.
Crees que la oruguita sabe qué va a pasar después?
Crees que el pobre se pelea consigo mismo sobre si es el momento o no?
Quien manda en el proceso es su organismo, algo mucho mayor que sus opiniones o sus ganas de hacerlo o no. Es una cuestión de supervivencia, mi amor. No le queda otra que confiar y dejarse hacer. Si la oruga no se transforma, probablemente se enfermará o morirá.
Y habrá momentos en los que eso también te pasará
a ti
a mi
a todes.
Son los ciclos de la vida-muerte-vida y no nos queda otra que bailarlos.
Como estos ciclos son inevitables, resistirse causa sufrimiento. Es mejor aceptar y transformarte. Recomiendo fuertemente que te observes, te investigues y notes en tu cuerpo, en tus gestos dónde la energía del cambio está manifestándose. Busca recursos que te ayuden a notar qué hay que soltar, desapegar, dejar ir, resignificar.
En las sesiones de tarot es el arcano de la Muerte el que enuncia que ha llegado la hora. El arcano viene para cortar todo lo que no te sirve más y lo hará aunque no lo quieras. Su trabajo es limpiar, purgar, cortar y quitar la mala hierba.
Lo que sea para abrir espacio para que puedas volar.
Si te conoces bien, atravesarás la tormenta con coraje, a pesar del miedo. El camino solo puedes recorrerlo tu, pero no tienes que hacerlo desacompañade. Es importante estar rodeade por personas que respeten tu metamorfosis y que sean capaces de abrazarte por más raro que les parezca qué les estás pidiendo y no sepas explicar exactamente qué te pasa.
Confía en tí.
Amor y Luz,
Mariana Amaral
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