Texto integral del post Sobre la Creatividad (6 sugerencias y un chisme personal) publicado en Instagram el 16-sept-2022
Y si yo te dijera que hay una forma de vivir revolucionaria que nos permite flotar internamente, creando una rutina paralela que se entrelaza a veces al calendario habitual que solemos aceptar sin pensar. Una vida creativa puede guiarte de forma a sobrevolar las necesidades enfermizas del sistema en el que vivimos iluminando tus pasos, mientras espera la hora del día en el que te dedicarás a ti.
Te permites soñar con esta realidad?
En lo más hondo de tu ser, que te pasa por la mente si te planteas no ir a trabajar por un día, por ejemplo, o a no decir a las demás personas qué tienen que hacer, solo-por-hoy? Quizás tienes la fantasía-certeza de que la casa se volverá un caos o de que el equipo va a empezar a jugar pocker en la oficina. Puede que eso pase, pero puede que no.
Te propongo que imagines también qué cosas, en este mismo día, harías solo para ti. Sí, en este día en el que no sabes que va a pasar si dejas de hacer lo que te parece imprescindible para que todo-siga-igual, qué harías? Irías al parque? Al cine? A la iglesia? Te quedarías en casa haciendo qué cosas?
Qué sucede en tu interior si piensas en dedicarte un momento al día a ti y a las cosas que te gustan? Tienes un hobbie? Tienes un hobbie secreto? Qué de verdad tienes ganas de hacer?
No, no vale contestar sin pensar, siéntelo, qué harías si no tuvieras miedo de escuchar-te.
Puede que no tengas una respuesta, mi amor. Y puede que esto te duela, te veo y lo siento.
Sabes que pasa, que muchas veces estamos tan habituades a la falsa sensación de que somos imprescindibles al 100% que esto tapa, oculta o sirve de excusa para que no hagamos lo que tenemos que hacer por y para nosotres.
Te has preguntado alguna vez qué pasaría si no estuvieras en la vida de las personas a las que quieres? Es dura la reflexión, lo sé, pero me parece inteligente pensar en diferenciar la percepción que tenemos sobre nuestro papel en las relaciones cercanas y lo que pasa en la realidad. Muchas veces nos excusamos en el papel que ocupamos y esto no es justo ni para ti, ni para nadie.
Entonces, sigo con más reflexiones: Hasta qué punto somos capaces de sostener los deseos de otra persona? Qué miedos identificas en ti de sólo pensar en soltar el deseo ajeno para escoger quedarte con el tuyo?
Yo, Mariana Amaral, hoy día no creo que sea capaz de sostener un sueño que no sea el mío. Sí, puedo sostener un sueño compartido con otra(s) persona(s), pero no el sueño, el deseo de una otra persona. Te cuento un chisme personal: hace muchos años (pero muchos-amém) yo escribí más de la mitad de la tesis de doctorado de una ex pareja. Más-de-la-mitad. La escribí yo porque la otra persona estaba cansada ya que había dejado todo para el último momento. Pero lo hice sobre todo porque me daba contorno en aquél momento hacerlo, me daba una identidad-sombra y porque yo sabía que lloverían halagos por mi sacrificio. Vaya miseria… vaya mierda de identidad. Pero era lo que me parecía lo mejor para mí.
Que buena compañera era yo, ¿no? Pues no. Mirando en retrospectiva me entiendo y me perdono, y veo que lo que pasó no fue justo para ninguna de las partes. Hoy sé que si hubiese devuelto a la otra persona el peso, la densidad, el esfuerzo y la alegría de construir su sueño, de terminar lo que había empezado, hubiese fortalecido nuestra relación, que se acabó meses después. Además de que seguramente mi ex se hubiera ahorrado la vergüenza que pasó ante el tribunal, que por supuesto se comió la tesis con patatas. Y yo pues, hubiese aprovechado mucho mejor mi tiempo dedicándolo a mis cosas, mis tesis, mi vida, mi única vida, gente linda. Escribir la tesis de otra persona es algo que no recomiendo a nadie, es una pesadilla, mi amor. No lo hagas, porfi.
En fin delfín. Tenernos anclades en nuestras vidas es un gesto de autoamor y también de justicia. Por algo se nos han regalado una vida y es nuestra misión vivirla, me parece. En esta vida hay algo que se llama creatividad que es, entre otras cosas, nuestra capacidad de entregar al mundo algo que sólo nosotres somos capaces de hacer, de crear. También puede ser una forma de estar en el mundo, de ser y de transitar la vida con placer y alegría.
Para tener una vida creativa, necesitas básicamente:
1) encontrar algo que te de placer porque-sí y hacerla rutina.
2) desarrollar unas ganas de mirarte de forma curiosa con cierta frecuencia;
3) llevar tode tu a hacer cosas diferentes en soledad (pueden ser micro-cosas. No chirríes aquí, por favor, piensa un poquito antes de rechazar la idea. No estás siendo egoísta, estás tratando de conocerte más y estar más a gusto con tu vida).
4) ubicar en ti un deseo de concretizar algo, de materializar alguna cosa en tu vida. Puede ser una habilidad, un proyecto-hobbie, un hábito, un estado interno, un libro, un nuevo sistema de agrosilvicultura, una transición de carrera, una ONG, cualquier cosa que desees ver materializado en tu día a día e investigar sobre ello.
5) explicar de manera breve y objetiva a tu entorno que necesitas una hora para hacer una cosa a solas. Esta es la parte más difícil para mucha gente, pero es necesaria. El tema da para otro post porque es importante y es necesario visibilizar la dificultad que tenemos las personas de sentirnos autorizadas a pedir espacio sin sentirnos culpadas y/o juzgadas.
6) sostener por un tiempo los puntos anteriores. La constancia para seguir firme en tu propósito de vivir de una forma en la que tu estés en el centro, que te dediques a ti y a tu creatividad un rato al día sin ruido, que te complazcas es algo que exige algo de esfuerzo al principio, pero se hará cuerpo y entenderás todo pasado un tiempo de visitar-te.
Y por favor, si tienes que empezar en secreto porque es la única salida que encontrarás de momento, hazlo. Cómprate una cajita de lápices de colores y un bloque de notas que te quepan en una bolsita y te encierras en el baño por una hora a dibujar-porque-sí, pero hazlo. O puedes comprarte un puzzle de 10000 piezas y despertar a las 4am porque no te aguantas de ganas de seguir haciéndolo en el garaje del coche, debajo de una mantita, pero hazlo. Encuentra tu forma de alegrarte y darte placer por dentro, sin grandes explicaciones, porque es así que la energía creativa se despierta y gana cuerpo, como un músculo.
Ve, ve. No se lo diré a nadie que lo estás intentando, te lo prometo.
Amor y Luz,
Mariana Amaral
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